FORBES
En días recientes, se ha planteado la posibilidad de que los tiempos electorales alcancen nuevamente la discusión sobre la aprobación del nuevo tratado de libre comercio entre México, los Estados Unidos y Canadá. El presidente López Obrador ha dicho que el acuerdo es bueno para México, por lo que no debería abrirse a discusión nuevamente, por lo que pidió acelerar la aprobación de las leyes que modifican condiciones laborales, de acuerdo a lo que se generó en la negociación con dichos países, por lo que el Congreso entró sin mayor reparo a dicha discusión y aprobación. Eso refleja la necesidad de mantener condiciones favorables para el comercio, pues eso implica condiciones para mantener empleos, ingresos, infraestructura y creación de valor para el país.
El problema, es que el comercio global ha entrado en un proceso de declive desde el año pasado. De acuerdo a la Organización Mundial de Comercio (OMC), en 2018 el comercio apenas alcanzó un 3% de crecimiento, mientras que en 2019 será de 2.6%, con una pérdida importante de dinamismo. Aunque se espera una recuperación en 2020, esta no necesariamente abonará a la resolución de las condiciones que ahora impactan el intercambio de mercancías. Solo para ubicar la referencia más inmediata, en 2017 el comercio creció al 4.6%.
Compártelo en: